Si la elección de Bruselas del F-35A para sustituir sus aviones F-16 había provocado muchas reacciones en Francia, a pesar de que el Rafale no se había presentado oficialmente en el concurso, las autoridades belgas habían demostrado ampliamente su compromiso a favor de una asociación estratégica con Francia, a través del contrato CAMO en 2018 relativo a 442 vehículos blindados VBMR Griffon y EBRC Jaguar de factura tricolor, así como por encomienda en 2019 al Grupo Naval Francés y a su socio belga ECA el diseño y fabricación de 6 buques de guerra de minas de nueva generación. Los ejércitos belgas también recibirán otro material diseñado por los franceses, el camión equipado con un sistema de artillería más conocido por las siglas CAESAR.
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