Las armas de energía dirigida, como los láseres de alta energía y las armas de microondas, se convertirán en predominantes en los buques de guerra, armaduras e incluso en los próximos años, según el Pentágono. Más allá de los escollos tecnológicos que quedan por superar, particularmente en términos de producción de energía, el Departamento de Defensa ha tomado la iniciativa de confiar a uno de los veteranos de los programas láser a bordo de la Marina de los Estados Unidos, Christopher Behre, la redacción de un plan maestro técnico, que servirá de marco para todos los desarrollos de estos sistemas de armas en los ejércitos estadounidenses, pero también de sus componentes.
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